ELEGÍA ESTIVAL
Hace
un bello día
y
es necesario
morir,
hoy que alumbra
como nunca
y yo me apago
para siempre.
morir,
hoy que alumbra
como nunca
y yo me apago
para siempre.
No
volverán
las
estrellas
a reírse de mi soledad,
ni las calles
que jamás terminan,
soportarán
mi paso cansado
y sin rumbo fijo.
a reírse de mi soledad,
ni las calles
que jamás terminan,
soportarán
mi paso cansado
y sin rumbo fijo.
Ahora
el susurro
del
viento,
y la dulce canción
de las aves,
no serán turbados
con el grito silencioso
de mi voz,
y no volverán a oírme.
y la dulce canción
de las aves,
no serán turbados
con el grito silencioso
de mi voz,
y no volverán a oírme.
Nadie
me echará de menos,
porque
nadie querrá la vida
de un cadáver
que se descompone
con el ritmo vertiginoso
de los minutos;
porque no podré quitarme
el inmundo hedor
que trae consigo
la peste de una vida ligera
y mal vivida.
de un cadáver
que se descompone
con el ritmo vertiginoso
de los minutos;
porque no podré quitarme
el inmundo hedor
que trae consigo
la peste de una vida ligera
y mal vivida.
Sería
horrible
la
presencia
de una bestia
que mató a sus hijos
cuando apenas fecundaba,
y tumbó su casa
sin haberla levantado.
de una bestia
que mató a sus hijos
cuando apenas fecundaba,
y tumbó su casa
sin haberla levantado.
Quiero
desaparecer
completamente;
quiero borrar
todas mis huellas
del mundo,
y regresar por fin
hacia la nada,
de donde nunca
debí fugarme.
quiero borrar
todas mis huellas
del mundo,
y regresar por fin
hacia la nada,
de donde nunca
debí fugarme.
Carlos
Marzo 14 durante la tarde caminando
ResponderEliminarEste ayer resultó de sus ojos
aire que fue respiro
ilusión que nació de sus labios
instante en que mi ser fue mendigo
desnudo de su carne insensata
sabor a aire, tierra y olvido
lugar en el que mi grito llora y su ausencia se abandona
Ayer emergió de él mi rostro vagabundo
tiré mis manos al callejón del miedo
las palabras del olvido de mi ser engañaron mi suerte
Donde hubo amor quedaron en cenizas mis preguntas
Él, engendró la mujer que ahorcó la debilidad
y renació obstinada en el mismo cuerpo
la escritura tomó su voz para permitirme hablar
ya no oigo más que su necesidad de mi
Brigitte Juliette
Uy, qué maravilla, no se imagina cuánta falta me hacía volver a sentir su voz!
Eliminarese modo en que somos, también nosotros mismos
ResponderEliminares demasiado con saber que se existe y que todo es
como el olor de su sexo en mis manos
como el grito que rasgó mi pecho
como el silencio escondido en mi almohada
como la noche en que besé sus besos
como el aire que asfixió mi respiración
como el lugar en que desnudó mi piel
como el cigarrillo después de su orgasmo
como el vicio que engendró mis heridas
como sus manos inventando mis senos
como la mujer que soy cuando decido amar
como la lluvia que ahoga mis sombras
como la nostalgia de sus pasos sobre los míos
como la necesidad de su aliento en mi cuello
como su ausencia en mi cama
como el dolor de sus caricias en mi espalda
como las palabras que no sé decir
como la vida que se me va mientras escribo
como la soledad de sus ojos buscando un paradero sin prisa
como la forma de sus labios chocando en mis mejillas
como el intento de ser con él de otro modo yo
como hacer el amor respirándonos la piel
como él en su madrugada sin sueños
como yo en mis noches sin cielo
como el flujo incesante de nuestros cuerpos
como mi debilidad arrodillada ante su existir
como todo lo que ha sido y lo que no es
como la mujer que soy entre lineas, voces y silencios
como mis soledades sin destino
como cada cosa que se va de mi
como el lugar que habito cuando no soy